El popular servicio de alojamiento de archivos Rapidshare de Alemania, ha debido entregar los datos de personas que habrían violado los derechos de autor, luego de sendas demandas presentadas por los sellos discográficos.
En una de estas demandas se logró el allanamiento de la casa de un usuario que había subido el último disco de Metallica “Death Magnetic”, un día antes de su lanzamiento oficial el año pasado.
Los sellos discográficos están haciendo uso de un párrafo específico de la Ley de Derechos de Autor alemana (el 101), el que anteriormente fue utilizado para obtener los datos personales de quienes compartían archivos por medio de las redes de intercambio de archivos (P2P).
El párrafo permite a los titulares de derechos de autor obtener el permiso de un juez para solicitar a los ISPs, que revelen los datos personales de los usuarios que han hecho uso malicioso de un archivo de su propiedad. Lo que ahora están haciendo las discográficas es extender el uso de este párrafo para perseguir también a los servicios de alojamiento de archivos, como es el caso de Rapidshare.
Producto de lo anterior todo aquel que comparta un archivo por medio de las redes P2P o en un sitio de alojamiento de archivos, puede verse enfrentado a la persecución legal si es que comete una infracción sobre los derechos de autor (según las leyes Alemanas).
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