jueves, 14 de mayo de 2009

Francisca Valenzuela


“En Chile la gente no quiere comprar discos
ni pagar más de dos lucas por un concierto”

A sus 22 años, la cantautora chilena entró de forma mateórica en la industria musical. Luego de lanzar dos singles promocionales, y con sólo 20 años de edad, obtuvo Disco de Oro con su primer trabajo titulado “Muérdete la lengua”. En tres años se convirtió en la artista nacional más joven que triunfa en Chile y en países dentro de la región.

Por Catalina Gómez

Con una propuesta diferente y un marcado estilo, Francisca Valenzuela pasó de cantar en pubs y restoranes, a transformarse en la cantante revelación de 2006. Logró sacar su primer single llamado 'Peces' y en pocos meses, causó gran impacto, sonando en la mayoría de las radios nacionales. Al poco tiempo dio un gran salto: firma contrato con el sello más importante de Chile, Feria Music.

Versátil y multifacética, la joven artista toca teclado y guitarra, su música se mueve entre el jazz, el pop y el rock, canta en inglés y español, y las letras de sus canciones pueden ser livianas y divertidas, como también tener un fuerte contenido social, inspirada en el rol de la mujer. En junio de 2007, lanza su disco debut llamado 'Muérdete la lengua', con el cual rápidamente obtuvo Disco de Oro por alcanzar las 15 mil copias vendidas dentro del país.

¿Cuándo firmaste con Feria Music y cómo se dio la oportunidad?
En 2007. Mi primer disco, “Muérdete la lengua”, lo saqué de manera independiente y luego con el disco en mano me junté con los productores, me ofrecieron un contrato y se los licencié.

¿En qué consistía el contrato?
Estamos asociados vía licencia. Les “presté” el disco por un tiempo definido, ellos lo distribuían a lo largo de Chile y ayudaban en todo lo que tenía que ver con la promoción y marketing de éste. Por ejemplo, algo importante fue cuando lanzamos el disco y se hizo una rueda de prensa formal con los principales medios de comunicación.

¿También te ofrecían difusión en medios de comunicación o coordinar giras?
Mi contrato con ellos es básicamente distribución y promoción, se incluyen los medios de comunicación cuando hay un hito para promocionar, por ejemplo, cuando se lanza un disco o se organiza un concierto masivo.

¿Y de quién es el master?
El master es totalmente mío porque ellos no financiaron nada del disco. El disco lo financié yo y tampoco ellos me lo compraron, por eso es como una especie de préstamo.

¿Cómo ha sido tu experiencia con el sello?
Estoy contenta. Han sido contratos claros, bajo términos transparentes. Creo que es una relación de mutuo beneficio. Uno tiene que entender que el sello busca vender discos y es parte del negocio. Dentro de las cosas buenas me han ayudado en la venta de discos, a que estos tengan visibilidad, promocionarlos y distribuirlos a lo largo del país. Pero creo que lo más complicado para un sello es que mantenga un interés parejo en todos los artistas de su catálogo. Generalmente, ocurre que uno pasa a un plano secundario cuando llegan artistas de la tele o fenómenos como La Noche. El desafío es cómo generar nuevos espacios y nuevas oportunidades para los artistas.

¿Crees que los sellos son imprescindibles para la carrera de un artista?
Depende del camino que quiera seguir cada músico. Hay artistas que buscan ser masivos, visibles y comercializar sus discos de una manera convencional, entonces es necesario tener el apoyo de un sello, por la red de contactos que posee, la infraestructura y la institucionalidad que te entrega. Además suenas en radios desde Arica a Punta Arenas y salen noticias tuyas en los diarios. Pero hay muchos artistas que funcionan bien de forma independiente, con autogestión y creo que es posible subsistir así. Por lo menos en Chile, que es un medio más chico, inmediato y de contacto directo.

¿En tu caso Francisca, cuál es tu principal vía de ingreso, por la venta de discos o música en vivo?
La música en vivo porque el sello no me corta porcentaje por ellas, y lo que obtengo por mis composiciones. Por difusión radial y televisiva me llega un porcentaje por los derechos. Además, a veces hay contrataciones para hacer grabaciones.

¿Estás a favor de la ley de derecho de autor (SCD)?
Estoy de acuerdo con que se le pague al artista por el uso comercial que la gente haga de sus canciones. Más allá de las descargas personales, creo que es fundamental que los medios y empresas convencionales que ocupan la música de artistas, inscriban los temas que utilizarán y les paguen a sus autores. En cuanto a las descargas personales, la gente no debería pagar, pero sí asegurémonos que el público quiera y se disponga a ir a los conciertos y pagar por una entrada. Ése es el principal problema en Chile, no quieren pagar el disco, pero tampoco quieren pagar la entrada que cuesta más de 2 mil pesos. Entonces cómo va a subsistir un artista, un show, el equipo técnico, los músicos, el transporte, si no tienes ningún tipo de ingreso.

¿Cómo ves Internet, como una interesante vitrina o una amenaza contra la venta de discos?
Creo que Internet es una herramienta importantísima y funciona muy bien como complemento y arma de difusión. En mi caso, no estoy en contra de las descargas, me ido haciendo parte de diferentes plataformas como My Space y i- Tunes. Agregué la alternativa para que la gente descargue gratuita y directamente las canciones. Así e conocen, escuchan tus canciones, ven tus vídeos, eres visible. Prefiero correr el riesgo de quizás no vender tantos discos, pero llegar a un público masivo y que vayan a mis conciertos.

Más información en:
http://www.myspace.com/franciscavalenzuelam
http://www.francisca-valenzuela.blogspot.com/

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